Odio a los perros
y a sus dueños. Sé que con está confesión me ganaré muchos enemigos, o no, es
lo bueno que tiene que no te lea nadie que puedo decir lo que se me antoje.
Pero por si por una de esas casualidades que tiene
la vida alguien leyera esto, explicaré los motivos que me inducen a profesar
este odio hacia tan bellas
criaturas.
¿Para qué sirven estos animales? Y cuando hago esta
pregunta no me estoy refiriendo a los perros lazarillo de Tormes, ni a los
perros policías o a los policías perro, ni a los perros que tiran de trineos
cuya función es vital para nuestra sociedad, ni al perro de Paris Hilton… Me estoy refiriendo al
95% de casos restantes, al perro conocido como animal de compañía. Es curioso
que cuando “de compañía” califica a la palabra “animal” no suena tan bien como
cuando acompaña a la palabra “señorita”. Misterios del lenguaje.
¡Coño! Pues sirven para hacer compañía, como su
nombre indica… gilipollas. Gracias por la respuesta amigos faltones, pero no estoy de acuerdo, yo niego la mayor. ¿Qué puta
compañía hace un trozo de carne peludo, meón, cagón y escandaloso? Si quisiera
esa compañía llamaría a mi suegra. Pero
yo ya tengo una televisión a la que no hay que alimentar ni sacar a pasear.
Y yo pregunto ¿Para que queremos compañía? La
compañía, al igual que la amistad, el amor, un político honrado, una novia
guarrilla, un empleo digno, una vivienda asequible, un tertuliano heterosexual
y muchos otros conceptos abstractos no existen. Todo es mentira.
Desde este humilde foro pido un merecido reconocimiento
a la soledad, la tranquilidad, el hacer lo que te salga de los cojones en el
momento que te apetezca y con quien te apetezca, es decir: estar solo en casa
haciéndote todas las pajas que tu
organismo pueda aguantar. Que según… he oído por ahí son diecisiete al día.
Pero por interesante que sea el tema pajeril, no nos desviemos y vayamos a
lo que nos interesa hoy: los perros como animales de compañía. Una farsa creada
por las tiendas de mascotas y los fabricantes de comida para perros con la
colaboración de Scootex y Loterías
del estado.
Es que el
perro es el mejor amigo del hombre… y así nos
va como sociedad. En el momento en que tu mejor amigo es un perro estás
apañado. Es que los perros son muy
inteligentes… Si ladrar y menear el rabo cuando oyes la puerta del ascensor
es inteligente tendríais que verme a mi cuando mi mujer llega del trabajo, un Nobel me merezco. Es que son más fieles que las personas… O que las personas normales
y corrientes que no te aguantan por que estás chiflada.
Me gustaría detenerme un momento en un punto muy
delicado. Un tema que ha hecho que tenga tres condenas firmes y cuatro juicios
pendientes por homicidio: La humanización
de los perros. Si señores, está pasando.
¿Qué es ser humano y que es animal? Esta pregunta
que parece obvia no lo es tanto para muchos millones de personas. Por eso daré unas
pequeñas directrices para distinguir a las personas de los animales.
Los perros andan a cuatro patas, excepto cuando van
a echar la Primitiva, en cambio las
personas suelen andar sobre sus dos extremidades traseras, a excepción de Nacho Vidal que anda sobre tres o
ciertas personas los sábados cuando llegan a casa de madrugada, en este último
caso es posible que los veáis sobre cuatro patas, los distinguiereis de los
perros porque los animales no se orinan encima.
Los perros tienen el cuerpo cubierto de pelo. Las
personas no, salvo ciertos hombres y ciertas mujeres portuguesas.
Los perros emiten un sonido que se denomina ladrido. Las personas que no son
políticos o tertulianos de televisión han desarrollado un lenguaje más
sofisticado para comunicarse entre ellas.
Espero que con estas indicaciones seáis capaces de
distinguirlos, no es fácil pero se puede.
Volviendo a mis asuntos judiciales, intentaré explicar el motivo de mis tendencias
homicidas.
Existen personas que ya sea por falta de calor
humano, o por sufrir un trastorno de distorsión de la realidad o porque son
gilipollas, tratan al perro como si fuera su hijo o nieto, en función de la
edad del enfermo. Pero esto no es lo
peor, porque allá cada uno con su locura, lo malo empieza cuando te quieren
hacer a ti participe de su psicopatía y cuando entras en su casa, hablan con el
perro diciéndoles cosas como: “¡Mira! Ha venido tu tío/primo/tete… a verte,
dile hola, dile hola…” Aquí estaría bien que el perro efectivamente dijera
“hola” provocando un infarto cerebral a su interlocutor que acabara con su sufrimiento…
y el tuyo.
Una de las grandes frases del mundo perruno es:
“Tranquilo que no muerde” o “Solo quiere jugar". A la primera frase yo
contestaría... “Se lo agradezco” y a la segunda “Pues yo no”, pero no es
molestéis en contestar, cualquier cosa que digáis os hará quedar como un ser repugnante odia animalitos sin
sentimientos que desayuna cerebros de niños huérfanos.
En estos casos me gustaría lanzarle a la señora en
cuestión un caimán de ciento veinte
kilos encima mientras tranquilamente le explico que esté tranquila que solo
quiere jugar… con sus intestinos.
Un paso más en la imparable escalada de locura de
los dueños de los perros, es el beso
con lengua con sus mascotas. Cuando vemos esto, podemos estar seguros de que ya
no hay marcha atrás, esta persona está totalmente abducida y no hay nada que
hacer. Lo más prudente es alejarse todo lo que podamos sin mirar atrás, y
evitar todo trato humano con estas personas. ¿Qué podemos esperar de una
persona que le come la boca a un animal que minutos antes ha estado lamiendo el
ano de otros animales, o sus órganos
sexuales? Es curioso destacar en este punto que estas señoras come culos
perrunos son las que llevan veinte años sin realizar una felación a sus maridos, porque según ellas les da asco. Que no digo
que los maridos lo merezcan, pero ahí dejo el dato.
¿A dónde quiero llegar con todos estos prejuicios absurdos y sin sentido? Muy
sencillo. Quiero alertaros de un asunto muy importante que espero que lo podáis
leer antes de que sea censurado por los que no mencionamos.
Estamos siendo invadidos.
Así es queridos lectores -o lector-. Los perros se están adueñando de nuestro
mundo y pronto ya nada será como antes.
Con la cooperación de unos cuantos traidores humanos han creado una red de
tiendas de animales y perreras con la intención de que no quede un humano sin
perro. ¿Por qué creéis que hay tanto interés y tantas campañas para que adoptes
un perro? ¿Por amor a los animales?... ¡Mis cojones treinta y tres!
Con la intención de seducir al mayor número de
incautos posibles están creando razas de perros cada vez más monos y adorables. Las viejas indefensas y los
viejos solitarios son su mayor objetivo, están cayendo como moscas.
Pero ahí no acaba la cosa, para seducir a otro
espectro más complicado de la sociedad como son las mujeres jóvenes y de
mediana edad han inventado la ropa y complementos para perros a cada cual más hortera. Han reproducido la formula
Inditex en los perros para de esa manera atraer a las mujeres. Todo esto
reforzado con la formula “Haz que lo lleve una famosa y todas las
mujeres/idiotas caerán”, de ahí que nos pongan hasta en la sopa a Paris Hilton
y su fabulosa perrita. George Clooney
fue abducido también pero no acabó de entender bien el tema y anda por ahí
paseando cerdos.
Los hombres tampoco están a salvo de esta
estrategia, ya que para ellos han sido creados los perros grandes, robustos y
fieros. Estrategia reforzada con la emisión a todas horas de “Rex”, que curiosamente es uno de los
jefazos de la raza invasora. Y si esto no funciona su mujer le obligará a comprar
un perrito adorable.
Casualmente existe una raza de perro para cada tipo
de persona… que curioso… ¿No?
Nuestras ciudades
están invadidas de perros. No puedes pasear tranquilo por la calle sin tener
que estar regateando perritos y correas extensibles -uno de los inventos más siniestros de la humanidad-. Ladran
durante toda la noche para no dejarnos descansar. Han conseguido cosas
impensables hace unos años: que les lleven por la calle en carrito de bebés o
lo que yo aún no he conseguido con mi novia… que me bese en el ojete, ¿Qué
queréis? Soy un hombre de gustos sencillos.
¿No os habéis fijado que cada vez hay más Bulldogs Franceses por todos sitios?
Están por todo el plantea y son más feos que una mierda, apenas pueden andar
sin ahogarse, no saben hacer nada de nada, no defienden ni protegen nada, no
tiran de trineos, no cargan sacos de trigo, no guían a ciegos, no llevan un
bidón de wiski colgando del cuello ¿Por qué hay tantos entonces? Muy sencillo,
porque son los comandantes de esta invasión. ¿A que se debe esa mirada tan extraña que tienen? Abducen
a sus victimas tan solo mirándoles con esos ojos estrábicos que te hipnotizan.
Alerto que esto no quiere decir que el jugador del Real Madrid, Ozil, sea uno de ellos… está por
confirmar.
Ahora tengo que dejaros, creo que han rastreado mi
ubicación, tengo que seguir moviéndome. Desde la resistencia os animo a seguir luchando, no nos rendiremos, no
desapareceremos en silencio -esto es de Independence
Day- lucharemos y venceremos y si alguien conoce a algún piloto de aviones borracho
que haya luchado en alguna guerra aunque sea la de Perejil que avise -esto
también es de…-.
Recordad si veis un perro por la calle, por
indefenso e inocente que parezca, no confiaros, huid, no dejéis que os miren
con esos ojillos infernales.
Corto y
cambio.
Sus padres empezaron a notar algo raro, cuando la
niña se subía las raspas de las sardinas a su habitación. Su merienda favorita
eran los huesitos y se ponía muy perraca cada vez que veía los Simpson y salía el
actor secundario Mel. El perro de esa casa pasaba mucha mucha hambre.
